El 30 de octubre de 1983, Raúl Alfonsín fue elegido presidente tras más de siete años de dictadura militar. Aquella jornada resultó, en varios sentidos, un antes y un después para la historia Argentina.
Para la educación cada
24 de marzo, en el
Día Nacional por la Memoria, por la Verdad y la Justicia, representa un momento importantísimo para reflexionar y concientizar colectivamente sobre las graves consecuencias económicas, sociales, políticas, jurídicas y culturales de la dictadura cívico-militar.
Hace varios años que Abuelas de Plaza de Mayo viene desarrollando un trabajo en las escuelas Argentinas: primero en el marco de su lucha en torno a la recuperación de los nietos apropiados durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983) y la restitución de su identidad. Así, en los años 80, la intervención de la ONG en las instituciones educativas tenía que ver con la búsqueda de niños que estaban probablemente escolarizados y la necesidad de informar a los chicos, a sus docentes y a sus familias sobre la temática.
Con los años la relación con las instituciones educativas fue tomando otras dimensiones, en particular, posteriormente a la elección de
Néstor Kirchner como presidente de la República (2003-2007). Desde ese momento y hasta hoy, diferentes organismos de DD.HH. se han visto apoyados por el Estado, potenciados en su accionar.
En ese marco se han podido pensar y desarrollar propuestas que involucran a
Abuelas de Plaza de Mayo y al
Ministerio de Educación argentino. Una de esas iniciativas conjuntas es
“Las Abuelas nos Cuentan”, un material destinado a las escuelas primarias.
La falta de información en la formación docente sobre cómo abordar la problemática fomenta que el material fuera recibido con mucho entusiasmo.
“Por primera vez el Ministerio de Educación tenía la posibilidad de problematizar la cuestión del terrorismo de estado y para ello esta herramienta era súper pertinente”, detalla
Irene Strauss, responsable del área de Educación de Abuelas.
Esta propuesta comienza en el año 2005, pero empezó a gestarse años antes cuando los docentes enviaron un mail a la organización para que
Irene les sugiriera un cuento para abordar el tema de derechos humanos.
La consigna del proyecto partía de la siguiente base: que las abuelas que estaban buscando a sus nietos eligieran un libro. Estos no debían tener relación con el terrorismo de estado o la apropiación de bebés, sino que les hubiera gustado contárselo a esa persona.
“Las Abuelas nos Cuentan” es un material que se propone contribuir con la garantía del derecho a la identidad, en sus distintas dimensiones, y enriquecer una línea de trabajo centrada en la literatura, la escucha y la narración, en tanto oportunidades existan para abordar los temas de memoria y Derechos Humanos en las escuelas.
La inserción territorial durante los más de 15 años en los que el material se utilizó cada 24 de marzo, permitió que dicho recurso se posicione como una herramienta indispensable para docentes y alumnos.
A 45 años de la conformación de
Abuelas de Plaza de Mayo, la colección
“Las Abuelas nos Cuentan” se renueva para proponer nuevos cuentos y relatos, escritos por autoras y autores de nuestro país, y así seguir trabajando en las aulas el derecho a la identidad.
“Casi 20 años después del lanzamiento del proyecto el objetivo es distinto. En aquel momento era necesario instalar el tema y con los años entendemos que al cuadernillo le faltaban cuestiones de identidad o educación sexual, por ejemplo. Para esta edición convocamos a autores que hayan empezado a publicar después del 2003 para mostrar el traspaso generacional y qué significa hoy escribir sobre Memoria e Identidad”, sostiene
Strauss.
El proyecto conjuga el derecho a la educación con lecturas que contribuyen a imaginar y construir mejores presentes y futuros. Estos escritos ponen en diálogo distintas generaciones y asumen el legado de una democracia con
Memoria, Verdad y Justicia. Además, el material incluye un nuevo cuadernillo con orientaciones de lecturas, sugerencias de actividades, recursos y materiales complementarios destinados a docentes del Nivel Inicial y Primario.
“El Reencuentro”, de
Urretabizkaya,
“El Caballo que perdió la cola”, de
Villafañe,
“Abuela de trapo”, de
Durini o
“¡Canta, Nakin!”, de
Bodoc son algunos de los nuevos títulos que están presentes en esta edición.
“Lo valioso del material está en que puedan recibirlo y hacerlo florecer, ya que es una temática muy compleja y singular que no puede ser copiada”, concluye
Irene Strauss.
Queridas chicas, queridos chicos:
Las Abuelas estamos felices de compartir con ustedes estos cuentos que, seguramente, disfrutarán tanto como nosotras. Elegimos cada historia con mucho cariño, imaginando una sala de lectura compartida repleta de chicas y chicos y, también, de silencios, de risas, de preguntas y de miradas curiosas.
Porque con estos cuentos podemos viajar por otros mundos y otros tiempos, podemos divertirnos y, también, podemos emocionarnos o quedarnos pensando.
Somos abuelas y nos mueve el amor. Por eso, las y los invitamos a que compartan estas lecturas en familia, en sus salas o aulas, o con sus amigas y amigos, para que sean también ustedes quienes muevan esta rueda de amor colectivo.
¡Esperamos que les guste mucho!
Un fuerte y cariñoso abrazo de abuela.
Las Abuelas de Plaza de Mayo
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