Con el objetivo que los alumnos de las escuelas de todo el país organicen sus procesos de enseñanza y aprendizaje, se profundice el trabajo con los contenidos y se optimice el tiempo en el aula, el Ministerio de Educación de la Nación lanzó la iniciativa Libros para Aprender.

En total se entregarán 8.247.400 libros con 156 títulos diferentes a 3.577.464 estudiantes con una inversión de $6.030.519.633, 26. Son alumnos y alumnas de 18.849 escuelas primarias públicas de gestión estatal, privadas de cuota cero y privadas de oferta única.

“El objetivo es acompañar a las escuelas en este año con herramientas que son condición necesaria para el fortalecimiento de dos áreas claves en el proceso de aprendizaje”, detalla la Secretaria de Educación, Silvina Gvirtz.

Libros para aprender es una política educativa que distribuirá libros de texto de Matemática y Lengua en las escuelas primarias de la Argentina, bajo la modalidad uno a uno, es decir, que las chicas y los chicos llevarán los libros de la escuela a la casa y viceversa.



La entrega de libros también contempla capacitaciones a las maestras y los maestros, con libros específicos, que se iniciaron en el mes de febrero y se desarrollarán a lo largo del año para intensificar los aprendizajes en las asignaturas mencionadas.

“Los libros son una condición necesaria para que los estudiantes puedan aprender a leer. Es difícil comprender textos si no tenés que textos leer”, confirma Gvirtz.

El libro resulta una herramienta para el proceso de enseñanza y aprendizaje de los alumnos. Funciona como guía al momento de absorber nuevos conceptos

Proceso de selección

La selección de libros fue realizada a través de dos instancias: la Comisión Asesora Nacional (CAN), conformada por especialistas de las 24 jurisdicciones, realizó la recomendación de los títulos y la Comisión Asesora Provincial (CAP), conformada en cada jurisdicción, seleccionó una serie de títulos entre los recomendados. Esta política de distribución de libros con modalidad uno a uno ayuda a sostener a 1.200 trabajadores en relación de dependencia y 1.300 colaboradores profesionales contratados al año en la industria editorial.

“Nadie que los propios Ministerios para conocer las realidades de las escuelas de sus provincias” concluye la Secretaria de Educación, Silvina Gvirtz.