En Firmat, una ciudad de la provincia de Santa Fe, la
Escuela de Educación Secundaria Orientada N°421 "Dr Pablo Tiscornia", ha lanzado un certamen que está revolucionando la forma en que se enseña y se aprende. Denominado
Puentes 3.0 "Mafalda en Valor", este proyecto articula el nivel primario con el secundario mediante una innovadora propuesta que integra pedagogía, tecnología y valores. En una ERA donde la educación busca constantemente renovarse, este certamen se presenta como un faro que guía hacia una enseñanza más inclusiva, colaborativa y significativa.
El
Profesor Gabriel Pellegrini, Directivo, nos da la fundamentación
“A través de este certamen, repensamos cómo conectar los distintos niveles educativos a través de experiencias que combinan pedagogía, tecnología y creatividad. Nos interesa que los alumnos encuentren en los entornos digitales un espacio de aprendizaje colaborativo, donde el conocimiento y los valores sociales convivan. Esta articulación pedagógica no solo refuerza saberes académicos, sino que promueve la integración y la empatía entre estudiantes de distintas edades, generando vínculos y experiencias valiosas que enriquecen el proceso educativo"
Una propuesta basada en Mafalda
La idea es tan sencilla como brillante: usar a Mafalda, el célebre personaje creado por Quino, como nexo para unir a estudiantes de diferentes edades. Mafalda, con su aguda crítica social y sus valores imperecederos, se convierte aquí en una heroína que lucha contra los
"virus desvalorizadores". Estos villanos, representados por estudiantes de cuarto año de secundaria, encarnan desvalores como la violencia y la injusticia, y tienen la misión de congelar los valores positivos que Mafalda defiende.
El proyecto incluye un videojuego educativo desarrollado en la plataforma Roblox Education. En este entorno digital, los alumnos de nivel primario, guiados por sus
“padrinos virtuales” de primer año de secundaria, enfrentan desafíos curriculares y deben colaborar para superar a los virus y rescatar los valores que promueve Mafalda en sus historietas.
El poder de la gamificación y la realidad virtual
Además del videojuego, el certamen incluye desafíos interactivos y de realidad virtual que permiten a los alumnos experimentar aprendizajes de una manera inmersiva y atractiva. La gamificación se convierte en un medio para enseñar no solo contenidos de lengua, matemática, ciencias sociales y ciencias naturales, sino también valores fundamentales como la solidaridad, el trabajo en equipo y el respeto mutuo.
El impacto de esta metodología es innegable. Aproximadamente 400 alumnos de todas las escuelas primarias de Firmat participan en esta experiencia pedagógica, mostrando un alto nivel de compromiso y entusiasmo.
Dana, alumna de la escuela, comenta:
"Participar en el certamen fue increíble porque no solo jugamos, sino que también aprendimos a trabajar en equipo con mis compañeros. Algunos de nosotros éramos los padrinos de los chicos de primaria y los ayudábamos a resolver los desafíos que se planteaban, y otros entrabamos al juego como “virus desvalorizadores” e intentábamos complicarles las misiones. Estuvo bueno porque sentíamos que estábamos aprendiendo juntos."
La aceptación del proyecto ha sido abrumadora.
El Prof. Gabriel Pellegrini, creador del videojuego y coordinador del certamen, destaca:
“La recepción de los estudiantes ha sido muy buena. Los alumnos participantes han realizado un excelente trabajo descongelando todos los valores que necesitaba San Telmo, el barrio de Mafalda. Vimos a los chicos comprometidos, trabajando en equipo y resolviendo desafíos. Esto demuestra que la tecnología y los valores pueden unirse para hacer que el aprendizaje sea significativo y entretenido.”
Este tipo de iniciativas no solo refuerzan los conocimientos académicos, sino que también promueven la integración y la empatía entre estudiantes de distintas edades, generando vínculos y experiencias valiosas que enriquecen el proceso educativo. La Profesorsa Vanina Gismondi y Lorena Bellesi, responsables del contenido pedagógico del juego, enfatizan cómo esta experiencia ha permitido a los estudiantes contextualizar su aprendizaje en un entorno cultural y social cercano a su realidad.
Un compromiso hacia el futuro.
El certamen
Puentes 3.0 "Mafalda en Valor" representa un modelo de innovación pedagógica que tiene como objetivo crear puentes entre los niveles educativos y fomentar el aprendizaje colaborativo. Más allá de la competencia, este proyecto busca que los alumnos encuentren en los entornos digitales un espacio de aprendizaje donde el conocimiento y los valores sociales convivan.
El éxito de la edición de este año y el positivo recibimiento de la comunidad, aseguran la continuidad de esta iniciativa. Este certamen demuestra que la integración de herramientas digitales y el aprendizaje basado en valores pueden construir un modelo educativo inspirador y transformador para los estudiantes.
Docentes y alumnos: Protagonistas de un cambio.
La colaboración de todo el equipo docente es fundamental.
La Profesora Ma. Carolina Birocco, quien personificó a Mafalda, y
la Profesora Rosana Menna, encargada de la escenografía y recreación artística, han jugado un papel clave en el éxito del certamen. Este esfuerzo colectivo no solo pone en valor la figura de Mafalda, sino que también transforma el aula en un espacio dinámico donde los estudiantes son los protagonistas.
El certamen Puentes 3.0 se destaca por su creatividad, innovación y también por su capacidad para transformar la educación en un proceso dinámico, inclusivo y profundamente humano. En este camino hacia la mejora continua, la comunidad de la
Escuela de Educación Secundaria Orientada N° 421 de Firmat demuestra que, con esfuerzo y creatividad, es posible construir un futuro mejor a través de la educación.
El proyecto
Puentes 3.0 "Mafalda en Valor" no solo representa un avance técnico y educativo, sino también un compromiso con la mejora de la calidad de vida de la comunidad educativa. Esta experiencia inspiradora muestra cómo la educación, cuando se integra con herramientas digitales y valores sólidos, puede convertirse en un motor de cambio positivo y duradero.
Otras notas de esta sección