A partir de la sanción de la Ley de Educación Nacional N°26.206 en 2006, se diseña una política pública que crea señales educativas (Encuentro, Paka Paka y DeporTV). Estos medios toman valor como una herramienta que fortalece y complementa “las estrategias nacionales de equidad y mejoramiento de la calidad de la educación en el marco de las políticas generales del Ministerio de Educación”.

Cada tema que se proyecta en las pantallas, está pensado desde y para las aulas de las más de 60 mil escuelas distribuidas en todo el territorio nacional.

La importancia de tener señales educativas no se agota en la simple producción de contenidos, sino también en la construcción de una cultura desde una mirada latinoamericana. 

Educrear (EC): Encuentro nace desde el artículo 103 de la Ley de Educación Nacional, ¿cómo se enmarcan sus comienzos y su vinculación con las aulas?

Cecilia Flachsland (CF):  Veníamos de la crisis del 2001 dónde el sistema educativo estaba discutiendo cuál era el rol de las escuelas, que se tenían que adaptar a un contexto cambiante. En ese momento se reconoce que la educación no tiene que pasar solamente por las aulas sino también por las pantallas.

EC: ¿Qué se introdujo con la creación de canales educativos en Argentina?

CF: Hubo un largo camino recorrido dónde nos desarrollamos, nos expandimos e innovamos. Lo fundamental fue la capacidad de crear algo nuevo, que no existía en la televisión argentina: pensar una pantalla de alto nivel de calidad y demostrar que era posible hacer un programa de matemáticas, de filosofía o historia que tuviera muchísima audiencia. Motivamos la invención de formatos narrativos audiovisuales que anteriormente no existían.



EC: En diversas entrevistas marcan la calidad de los programas que se ponen en la pantalla. ¿Cuáles son las condiciones que deben darse para que esto suceda?

CF: Hay dos ítems a destacar. El primero es que logramos responder a los Núcleos de Aprendizaje Prioritario (NAP), teniendo en cuenta que las escuelas permiten generar contenidos transversales que hacen lo propio. Esto nos marca un horizonte sobre qué decir en la pantalla. De ese modo estamos atentos a temáticas contemporáneas: cómo funcionan las redes sociales, qué es el grooming o cómo opera el racismo estructural en Argentina. Ese modo de pensar es el “qué hablamos en la pantalla”. El segundo es pensar que los canales educativos funcionan en el predio de la Ex ESMA, lo que nos obliga a un compromiso sobre una agenda de Memoria, Verdad y Justicia dónde los Derechos Humanos aparecen en relación al pasado reciente y también a las deudas del presente. 

EC: En este contexto ustedes incorporan la figura del contenidista…

CF: Se trata de un especialista que puede ser investigador, académico o un docente que sabe muchísimo sobre cierta temática. Los contratamos para que escriban sobre un contenido que será el punto de partida para después, junto con la casa productora, una Universidad o una producción interna, un formato narrativo audiovisual. Ese contenido es el reaseguro que le permite al docente llevar el programa al aula sabiendo que fue pensado por alguien que está dedicado a estudiar el tema.

EC: ¿Cómo se corporiza la programación en el aula?

CF: Personalmente me sirve leer tesinas de personas que tienen cierta distancia y una mirada desafectada sobre el uso de Canal Encuentro en las escuelas. Hay dos ejemplos que se me vienen a la cabeza: muchos docentes explican que pueden mandar a los estudiantes a ver programas del canal más allá de haberlos chequeado previamente, porque saben se tomaron los reaseguros pedagógicos, éticos y políticos para correspondiente; y, además, el uso que se hace de los contenidos que subimos en redes sociales es lo que nos exige mejorar el contenido en vista de una necesidad educativa y no tanto por relevancia momentánea.



Durante la etapa 2015-2019 el Canal Encuentro implicó una recategorización de su valor educativo hacia una cuestión cultural que dio lugar, entre varias cuestiones, a una baja en la cantidad de producción y contenidos enorme. 

Con un diagnóstico profundo, el equipo que tomó las riendas del canal se puso a trabajar para recuperar el lugar de privilegio que los medios públicos educativos fueron creados a partir de la Ley de Educación Nacional.

Canal Encuentro asumió, junto al Ministerio de Educación, la producción de los contenidos de “Seguimos Educando”, una serie que ofrece materiales y recursos educativos para colaborar con la continuidad de actividades de enseñanza en el sistema educativo nacional. “Se trató de una salida urgente y necesaria que mostró la importancia que tienen los canales educativos”, afirma.

El recorrido que Canal  Encuentro, Pakapaka y DeporTV vienen realizando desde ese primer lanzamiento en 2005, es valioso para enriquecer y mejorar la tarea de los educadores a lo largo y ancho del país. Por esto, reconocer, mantener y sostener una política pública de medios educativos en Argentina resulta necesario para tener un espacio dónde discutir las representaciones culturales que nos interesan.

EC: En un contexto político-social convulsionado durante estos cuatro años. ¿Qué análisis queda?

CF: Mi anhelo es poder pensar políticas públicas que tengan continuidad. Al mismo tiempo hay enormes desafíos para un canal de televisión que produce contenidos para un mundo cambiante donde las pantallas son múltiples y los consumos se realizan a demanda. También es difícil para nuestras cabezas pensar a futuro cuando hay una opción política que pretende que los canales públicos deben ser cerrados.

Poner en cuestión la educación pública como horizonte de sentido es preocupante, esto nos produce un desafío enorme como canal educativo pensar en cómo hacer cada vez más sólido dos compromisos que se dieron con la recuperación democrática: las Malvinas son argentinas y la agenda de Memoria, Verdad y Justicia.