Actualmente, el mundo entero está preocupado por el medio ambiente y su conservación. Esta preocupación medioambiental se traslada a las instituciones escolares, quienes en sus procesos educativos de enseñanza y de aprendizaje, dedican esfuerzos para generar conciencia ecológica en las aulas.
En este sentido, la Escuela Agraria Alto Valle Este, de Río Negro, ha organizado un taller denominado
“La Huerta en Casa”, con el propósito de invitar a la comunidad educativa a crear soluciones originales para fomentar el consumo de
alimentos saludables.
La creación de huertos urbanos es una de las prácticas de
cuidado del medio ambiente que se está extendiendo en los últimos años, debido a la concientización mundial sobre el consumo de alimentos orgánicos.
Las posibilidades de interacción que generaron los proyectos permitieron la participación de las familias y el abordaje de temas que nos preocupan a todos, como la soberanía alimentaria y el desarrollo comunitario en diversos aspectos. Estas experiencias ponen de manifiesto la idea de sustentabilidad y la de la huerta como agente de cambio.
“El proyecto consiste en dar a conocer las herramientas técnicas básicas sobre huerta agroecológica para poder cultivar alimentos saludables en distintas superficies. Se apunta al trabajo integrado remarcando los beneficios de llevar adelante dicha práctica”, afirma María Soledad Gajdos, docente a cargo del proyecto.
El desarrollo se vincula, por un lado, con los alumnos de tercer año del establecimiento que son los encargados de llevar adelante el cultivo de distintas hortalizas y cultivos especiales en la huerta escolar. Al final del ciclo educativo, los estudiantes planificarán y llevarán adelante una huerta adaptada a sus condiciones de tiempo y espacio.
“Se brinda un servicio a la comunidad local realizando talleres sobre la temática en formato teórico-práctico”, detalla.
Estas iniciativas, no requieren de grandes espacios. Además, en un huerto ecológico se origina todo un ecosistema de biodiversidad saludable que contribuye al crecimiento de plantas. La agricultura ecológica permite reducir el impacto de nuestra la huella ecológica y generar nuestros propios recursos sin la intervención de químicos.
¿Qué es la huella ecológica? Es el indicador del impacto ambiental por la demanda que generamos de recursos y por los desperdicios que producimos.
A esto se suma que el destino de residuos orgánicos se puede transformar en el mejor nutriente posible para un huerto, a través del proceso de compostaje. Este resulta de gran utilidad para contribuir al crecimiento del huerto de manera casera, barata y reduciendo el impacto medioambiental.
“Hace 10 años que se viene trabajando en este proyecto, año a año vamos aprendiendo y mejorando varios aspectos que tienen que ver con despertar el interés en un público de distintas edades. La posibilidad de ser nombrados como un proyecto de interés para la región trae mucho orgullo tanto para la institución como a nivel personal y genera entusiasmo para seguir aprendiendo y trabajando en la temática”, concluye María Soledad Gajdos, docente a cargo del proyecto que se realiza en la Escuela agraria Alto Valle Este.
La implementación del proyecto pedagógico-productivo en la escuela posibilitó generar espacios de intercambio de los conocimientos técnicos curriculares con los saberes populares en torno a la producción de alimentos.
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