No es novedad que los medios de comunicación están cada vez más presentes en nuestra cotidianidad. En la actualidad, los medios tradicionales dan paso a formatos más individuales. Ya no nos juntamos en familia a la hora de ver televisión, incluso, en algunos casos existe la misma cantidad de pantallas que de personas habitando en cada casa. Esto, como todo cambio, trae sus ventajas y desventajas. Las campañas ante el grooming, los trastornos de sueño y atención en los más chicos son los conflictos más debatidos en la actualidad. Como docentes, estas problemáticas nos pueden hacer caer en un lugar de reaccionarios ante la tecnología corriendo el riesgo de que nuestra calidad pedagógica perjudique la motivación de nuestros alumnos.  Sin embargo, este tipo de análisis peca de ser reduccionista frente a la realidad que existe en zonas alejadas de las grandes capitales. 

El mundo globalizado en el que muchos vivimos a través de nuestro modem, no es tan global como creemos. Esto nos lo demostró el aislamiento que vivimos como comunidad en el 2020. En esa época, muchos chicos y chicas no pudieron obtener la educación de calidad que les corresponde por derecho. Cada profesional tuvo que crear una nueva currícula oculta, de acuerdo con las necesidades tanto de la escuela como la de cada barrio y/o zona.



Afortunadamente, donde no llegan las grandes empresas de comunicaciones, termina llegando el amor y la vocación a la enseñanza, cuya señal es infinita. Así lo demuestran profesores y alumnos del Bachillerato Orientado Provincial N°56, ubicado en el paraje Siete Estrellas de la localidad de San Pedro, Provincia de Misiones. El proyecto que allí se lleva a cabo desde el año 2016, recibe el nombre de FM Séptima Estrella. Se trata de una radio escolar y comunitaria, que sale tanto por frecuencia modulada como por internet, siendo la primera vía de trasmisión de vital importancia para la comunidad de la zona que prácticamente linda con Brasil.   

La finalidad de este proyecto en un comienzo, nos comenta Horacio Fariña, se centró en mejorar la lectura, escritura, comprensión y oralidad de los chicos y chicas que asisten al BOP N°56 y a otras escuelas aledañas. Sin embargo, los objetivos traspasaron lo pedagógico y la radio comenzó a tener una importancia para una comunidad, que, en ese entonces, necesitaba un ámbito de expresión, investigación e identidad cultural.

Debemos entender que el paraje Siete Estrellas es una zona de pequeños productores rurales.  Antes de la aparición del colegio, los chicos y chicas que querían seguir estudiando, y tenían la posibilidad de hacerlo, debían trasladarse al área urbana de San Pedro. Por este motivo, nos cuenta Horacio, la escuela en la zona es una institución relativamente nueva. Allá por el 2014, gracias al programa Conectar Igualdad, los estudiantes pudieron acceder a una notebook para sus estudios. Con dichas computadoras, se comenzó a gestar una revista “offline” a la que se podía acceder desde el servidor local de la escuela.  Este fue uno de los gérmenes de lo que luego sería la Radio dado que los chicos comenzaban a realizar entrevistas grabadas a familiares y vecinos. 



La revista tuvo como consecuencia la invitación a participar en el ReRECoM (Red de Radios Escolares y Comunitarias de Misiones). Gracias a este contacto, pudieron recibir capacitación para llevar a cabo el proyecto de la Radio. Tiempo después, los profesores del BOF N°56 se enteraron de que la primaria N°700 de Siete Estrellas tenía un equipo de radiofonía averiado. La escuela accedió a prestarlo y gracias a la ayuda de las personas de la zona, pudieron costear su reparación para que el 9 de abril de 2016, la radio saliera al aire por primera vez. 

Los resultados no tardaron en llegar. Los estudiantes no caían en su asombro al escuchar sus voces por primera vez. Esto fue un incentivo que permitió que los alumnos se preocuparan genuinamente por mejorar su expresión, tanto escrita como oral. Pasados los años, la naturalidad de los niños y adolescentes frente al micrófono se hizo notoria y el espacio se abría a otras comunidades aledañas en bibliotecas populares, iglesias y centros culturales, entre otros. Por otro lado, como resultado del proyecto hay muchos chicos que prefieren especializarse en la técnica y la producción. Como consecuencia, se abrieron talleres de sonido, manejo de consola, edición de audio y vídeo, entre otros. Esta apertura se debió a subsidios y premios ganados desde los inicios hasta la actualidad, siendo el más reciente la declaración del mismo como proyecto de interés municipal por parte del Consejo y la Nación. 



Ante todo lo logrado, no pudimos evitar hacernos una pregunta: ¿Qué aporta la Radio en la actualidad en medio de la avalancha de los nuevos medios de comunicación? Horacio nos responde que la radiofonía es un medio muy maleable y, por ende, democrático. “Sobre todo en regiones como la nuestra”, agrega el profesor, y continúa: “En el 2020 gracias a la radio, pudimos llevar a cabo las clases en zonas donde la internet es una novedad y no todas las familias acceden”. Esto no quiere decir que la radio no se expanda a otros formatos. Actualmente, desde Android se puede acceder a una aplicación oficial para escuchar la programación en cualquier parte del mundo. Sin embargo, ante la lógica unidireccional de las redes sociales, el medio persiste con un espíritu de encuentro, de debate y de reconocimiento con el otro.

FM Séptima Estrella está al aire las 24 hs con programas hechos tanto por la escuela como por la comunidad. Usualmente, cada uno dura una hora y está compuesto de tres bloques orientados, según el docente que esté a cargo. Cuando no hay gente hablando, se puede escuchar música regional y popular tanto de Argentina como de Brasil. En los intermedios de cada tema y programa, se oyen consignas que apelan a la comunicación, la confianza y la solidaridad. Éstos siempre están protagonizados por niños, niñas y ocasionalmente, algún adulto. Cada intervención no escatima en agradecimiento para la escuela y sus profesores, que supieron hacer del silencio un espacio colectivo que nos plantea muchas inquietudes sobre nuestro presente y nuestra capacidad de aprender de situaciones educativas diferentes.