Estudiantes y docentes de la Escuela Técnica N° 643 de la localidad de Roldán, en Santa Fe, están participando de la competencia CANSAT, una iniciativa presentada por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) junto con el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación. 

El proyecto “Misión Humedales” -como fue bautizado- quedó entre los 28 finalistas de entre más de 800 inscriptos. Su propósito consiste en detectar incendios en los humedales, situación que está afectando a miles de personas en los últimos tiempos.

“Llegar a esta instancia fue un poco por casualidad, ya que un amigo me avisó de la competencia y nosotros sin tener demasiada formación al respecto, juntamos a los estudiantes necesarios y nos anotamos”, comenta Marcelo Aimetta, docente de la institución y coordinador del equipo.

El equipo “Roldán I” está compuesto por: Celina Cudiciotti, docente asesora, y los estudiantes Santiago Bruditti, Leopoldo Zecca, Guido Reist, Santiago Giacola y Agustín Monteodorisio, quienes cursan en 3°, 4° y 5° año de la escuela secundaria.



La competencia se compone de una misión primaria, que consiste en medir diferentes variables atmosféricas, como la temperatura y la presión, y de misión secundaria, que la define cada equipo.

“Ya nos queda poco tiempo porque la semana que viene tenemos que presentar el satélite armado para ser evaluado por el jurado, con quienes los estudiantes tendrán una videoconferencia el próximo sábado para defender lo que construyeron”, explica Aimetta.

Cabe aclarar que el satélite, que tiene un tamaño de una lata de gaseosa, será lanzado a una altura aproximada de un kilómetro y los datos que emita durante la caída podrán ser recibidos por una estación terrestre. Esto les permitirá obtener mayor información para detectar focos de incendios.

Algunos de los parámetros que se podrán obtener serán el monóxido de carbono en el ambiente, los gases propios de la combustión de vegetales y las partículas en suspensión.

Los estudiantes le incorporaron un dispositivo GPS junto con el paracaídas para que, una vez en tierra, puedan rastrearlo y así volver a utilizarlo.

“Estas iniciativas tienen un valor educativo y pedagógico enorme, porque sacar a los chicos del ámbito normal de una clase para llevarlos a otro totalmente diferente es un gran desafío. En este trayecto aprendieron a programar, hacer plaquetas, conectar cables y hablan de sensores con una naturalidad que antes no sucedía porque no es la especialidad de la escuela”, afirma el docente y coordinador del equipo.

La alegría de haber sido elegidos ahora se transformó en los nervios lógicos por presentar el mejor satélite posible. Los integrantes del equipo “Roldán I” están conformes con el trabajo que realizaron y saben que van a entregar al jurado un proyecto fiable, que cumple con todos los requisitos solicitados para ser uno de los seleccionados finales. El lanzamiento está previsto para Octubre.

¿De qué trata la competencia?

Con el fin de acercar la ciencia y la tecnología a estudiantes de colegios secundarios, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) diseñaron la Convocatoria CANSAT Argentina.

CANSAT es una iniciativa internacional, impulsada por varias agencias espaciales del mundo, entre ellas: la NASA (EEUU) y la ESA (Europa). Propone a los estudiantes construir una carga útil, cuyo tamaño no supere al de una lata de gaseosa, y lanzarla en un cohete hasta una altitud aproximada de un kilómetro. De allí, el término CAN (lata) y SAT (satélite), por sus siglas en inglés.

La competencia comenzó en el mes de junio con 850 equipos inscriptos, provenientes de distintas escuelas secundarias de todas las provincias del país, de los cuales 490 presentaron un formulario de Revisión Preliminar del Diseño (PDR), con la descripción de su proyecto y un video de presentación para seguir en carrera.

Tras ser evaluados, quedaron seleccionados 28 equipos para competir en la cuarta etapa, que implica la construcción, seguimiento y validación de los satélites.

A fines de septiembre, se definirán cuáles son los cinco equipos que lleguen a la instancia final que se realizará la segunda semana de octubre desde el Centro Espacial Teófilo Tabanera (CETT), en Falda Cañete (Córdoba). A bordo de un cohete lo CANSAT ascenderán a 400 metros de altura y, una vez allí, se desprenderán del lanzador para cumplir sus misiones.