En los entornos virtuales estamos al tanto de qué suben nuestros músicos, políticos, futbolistas y demás personalidades famosas. Cada uno de sus posteos en Instagram o Twitter tiene cientos o miles de interacciones al instante. Lo que sucede, es que muchas veces en estos posteos, se ven errores de ortografía a los que no les prestamos atención.

Con la misión de generar una actividad lúdica, interactiva y de aprendizaje, Alejandro Galán profesor de Geografía e Historia, propuso a sus alumnos de 3° Año del Instituto “Cuatro Villas” de Berlanga, una escuela secundaria, de un pueblo de Badajoz (España), crear una cuenta en Twitter e Instagram para corregir los errores de ortografía de personas famosas. Así nació “Detectives de la ESO”.

La idea del docente comienza cuando, en un curso de formación, les enseñaban cómo podían emplear las redes sociales y las páginas web en el aula. Allí pusieron el ejemplo de una escuela en Brasil que las utilizó para mejorar el nivel de inglés de los alumnos. “¿Por qué no adaptarlo a nuestro idioma?”, pensó.

Para delimitar la actividad decidieron seguir y corregir a personalidades que tuvieran más de 20 mil seguidores en redes sociales. 



“Buenos días, Pedro. Somos un grupo de alumnos que corregimos faltas de ortografía. Tu falta ha sido no escribir tilde en la palabra “diálogo”. Un saludo”. A quién están corrigiendo en esta oportunidad es al Presidente de España, Pedro Sánchez, debido a una publicación que realizará en Twitter.

Además, entre sus “vigilados” están el director de cine Álex de la Iglesia, la cantante Rosalía, el futbolista del Real Madrid Isco, entre otros. 



Según Alejandro Galán, en el sistema educativo hay “muchos problemas” en cuanto a la ortografía y la gramática ya que la sociedad en la que vivimos, nos lleva a descartar rápidamente un texto u obviar errores en nuestra conversación online cotidiana. “En las escuelas algo no estamos haciendo del todo bien si no conseguimos estimular a los alumnos en leer más”, sostiene.

Partiendo de la base de que los alumnos están unas seis horas al día en el aula, las clases deben ser lo menos aburridas y más didácticas posible para lograr una aprehensión de los contenidos.

“La experiencia fue muy buena. Quienes se tomaron en serio la actividad mostraron mejoras y, además, aprendieron nuevas normas gramaticales, ya que, para corregir errores a otros, se debe conocer muy bien el asunto. Lo que planteamos es que la ortografía es importante y puede marcar la diferencia a la hora de encontrar un trabajo, por ejemplo”, explica Galán.

La repercusión que generó la actividad educativa que Alejandro desarrolló con sus alumnos de 3° de ESO del Instituto “Cuatro Villas” de Berlanga, tuvo una propuesta: escribir un libro al respecto. Así fue que en “Detectives de la ESO. Los magos de la tiza: profesores que enseñan divirtiendo” (La Esfera Libros), el profesor aborda la vocación docente, las virtudes de las redes sociales y el juego en el aula. Además, ofrece divertidas actividades para motivar a los estudiantes y desmontar mitos como que trabaja poco o que la sociedad avanza y la educación no.

La intención de Galán es mostrar cómo se puede enseñar con entusiasmo, dejando claro qué es la educación y cómo se puede recuperar la ilusión de enseñar, aunque se lleven muchos años en la docencia.



“Aproveché para tratar asuntos polémicos desde mi experiencia. Pretendo que este sea un libro motivador para quienes están en la duda de si quieren seguir la carrera docente”, explica Alejandro Galán.

Lo importante es reconocer la necesidad de generar actividades lúdicas que permitan motivar a los alumnos para que, en definitiva, puedan aprender nuevos conceptos. Para ello es necesario contar con docentes con vocación, amor y entusiasmo por lo que hacen, que sean conscientes de la increíble oportunidad que supone convivir con las generaciones del futuro. Maestros que, sin importar edad, experiencia o el contexto, quieran ser “magos de la tiza” y dejar una huella en su alumnado.